JHON ALEX TORO Y NOELLE SCHONWALD UNIDOS POR LA MALDAD - El Magazine Colombia

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JHON ALEX TORO Y NOELLE SCHONWALD UNIDOS POR LA MALDAD

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Estreno 18 de Enero: Lo Azul del Cielo


En Lo Azul del Cielo, la cinta protagonizada por Aldemar Correa y la actriz revelación María Gaviria, los actores Jhon Alex Toro y Noëlle Schönwald, le dan vida a dos personajes con la capacidad de cambiar la vida de muchos a su alrededor. Ellos hablan de la dupla que conforman en la película que se estrena el 18 de Enero.

Mito o realidad, producto de la imaginación o testimonio de la falta de fe; el demonio encarna en cualquier personaje para reflejar su maldad, y esta vez lo hizo como Berri y como Victoria en la cinta colombiana Lo Azul del Cielo, dos personajes que juegan un papel decisivo en la película gracias a sus tácticas rastreras para inducir al delito.

Pero antes de continuar hay que resumir cuál es la historia de esta cinta, ópera prima del director Juan Alfredo Uribe, que cuenta además con la actuación de Ana María Sánchez y de la actriz española, ganadora del Premio Goya 1995, Ruth Gabriel:

Camilo, un joven de clase media, que después de regresar del servicio militar y sin un claro porvenir en la vida, se ve presionado por su familia para que estudie o trabaje, acepta la propuesta del director técnico del equipo de fútbol en que juega, para cuidar a un antropólogo español secuestrado con fines económicos por una banda de delincuentes amateurs.

Durante las eternas jornadas Camilo y Don Vicente tienen largas conversaciones sobre Sol, la hija del antropólogo, con quien al finalizar el cautiverio Camilo se obsesiona, al punto de transformar su identidad y empezar a vivir una vida con dos caras. Los dos jóvenes se sumergen en un idilio efímero, hasta que algunos cabos sin resolver regresan del pasado reclamando justicia y obligando a Camilo a escoger otros destinos para evitar que su nuevo mundo se desvanezca.

“Lo Azul del Cielo revela una historia de amor en medio de la complicada
realidad colombiana, donde los sentimientos chocan contra la fuerza de la verdad.
Los diferentes conflictos dramáticos se apoyan en una tensión que siempre va en
aumento, en el excelente trabajo de las actores y en cada detalle cinematográfico
que confirma la buena mano y el talento del director colombiano Juan Alfredo Uribe”.

Jorge Franco
Autor Rosario Tijeras y Paraíso Travel


Lejos de ser una historia sobre el secuestro, esta cinta es un thriller romántico cargado de drama que demuestra que la felicidad no es un lugar donde llegar sino una forma de viajar y que las decisiones de vida, por sencillas que parezcan siempre traen consecuencias.

Noëlle Schönwald: Un cielo teñido de rojo
El cielo de Noëlle es el que deja ver un atardecer rojo. En cierta forma, va muy de la mano con Victoria, la mujer que interpreta en la película: apasionada, sexual, fuerte, ambiciosa cuando se trata de lograr sus objetivos. Una mujer que busca ser respetada en el círculo de criminalidad.

Se requería una actriz que supiera darle esa fuerza a Victoria, pero al mismo tiempo un toque de sensualidad que la hiciera ver aún más perversa y con eso en mente el papel fue desde el comienzo pensado por el director Juan Alfredo Uribe para Noëlle, quien le había impactado por su interpretación en Al final del espectro.

“Mi primera impresión es que se trataba de una película con una historia de amor bien contada. Y creo que finalmente resultó serlo”, sostiene Noëlle, quien no conocía al director pero asegura que su apoyo fue fundamental para este papel. “Fue muy agradable trabajar con él. Victoria fue un personaje que construimos juntos y sobre la marcha. Fue una experiencia muy enriquecedora para mi, creo que nunca había interpretado a una mujer bien malosa y Juan Alfredo fue una muy buena guía para lograrlo”.

Pero su personaje va más allá y se le ve como una mujer muy erótica, manipuladora pero ante todo peligrosa “Victoria tiene poder, el poder de matar, de decidir sobre la vida de otros; es inteligente porque en un mundo que es básicamente de hombres (el mundo de la mafia, diría yo) logra una posición de fuerza y dominio. Y sí, utiliza la sexualidad como un arma, aunque secundaria. Toda su vida ha estado sometida a la sordidez y a la dificultad, allí creció; y finalmente esto le enseñó a manejar a las personas con las que se relaciona”. 

Sobre su trabajo al lado de Jhon Álex Toro, su partner en la historia, asegura que fue “una delicia” y una experiencia enriquecedora. “Es un actor muy generoso que escucha y se conecta con el equipo y que genera buen ambiente. Por eso ayuda a que la creatividad y la concentración aparezcan”.

Jhon Álex Toro: Un diablo en el cielo
Este actor ha sabido construir una imagen de versatilidad y ganarse el reconocimiento del público a través de la televisión y de papeles en otras cintas. No en vano, el director de la película, Juan Uribe lo describe como “un actor camaleónico, con gran control tanto físico como intelectual”, a lo cual Toro sonríe con modestia.

 “He trabajado durante años para ser actor, he recogido experiencia, he estudiado y he tenido la fortuna de interpretar diversos papeles. Trabajo en televisión, en teatro, en cine. Tal vez eso me haga camaleónico, pero la verdad es que me gusta este oficio, me apasiona”.

Aunque muchos definen a Jhon Álex por algunos de sus trabajos en la comedia, lejos del prototipo del malo, su facilidad para dar vida a cualquier personaje es notoria. En la cinta su personaje sabe cumplir su rol de acuerdo con el momento y el espacio en que se desempeña.

De cierta forma es un diablillo en el hombro de Camilo (Aldemar Correa) y a la vez es un ‘corderito’ en manos de Victoria, su cómplice, interpretada por la actriz Noëlle Schönwald.
“Fue magnífico trabajar con Noëlle con quien había coincidido en otras producciones pero no habíamos hecho ‘llave’ hasta el momento”.

Cuando se le pregunta si su personaje en cierta forma es un ‘malo ingenuo’ es categórico al afirmar: “No creo que Berri se pueda calificar de esa manera porque no hay ingenuidad en él, por el contrario, creo que representa un arquetipo que a nuestra sociedad le hace mucho daño, una especie de ser agazapado que corroe conciencias y almas”.

Sobre el trabajo con el director Juan Uribe asegura: “Quedé encantado durante el rodaje con su energía y su manera de desenvolverse en el set, sabe conducir muy bien a su equipo de trabajo. También me encantó el resultado final, me parece impecable”.

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